Volvemos a estar como hace un año, quizás peor, en contagios de Covid en el país. Desde hace un año que en ningún momento hemos ido por delante de la pandemia, y eso sólo hace ver los inventos que diseñan los políticos que gobiernan tanto el país como comunidades autónomas, ciudades o pueblos.
Estamos en medio de una pandemia que ningún político se ha tomado en serio, ningún político en el gobierno ha sabido buscar el equilibrio entre la economía y salud ni tampoco hemos visto que se hayan preparado u organizado correctamente: lo han hecho todo a última hora. Un claro ejemplo de ello fueron las mascarillas. Como no había para todo el mundo, pues no eran necesarias. Acto seguido, los respiradores en los hospitales y los Epis para los trabajadores de sanidad, guantes, gafas y un gran etcétera. Ahora toca poner las vacunas y resulta que no han puesto ni un solo punto de vacunación de más; una auténtica vergüenza, mientras que en otros países, como EE.UU., no hace falta ni bajar del coche para que te pongan la vacuna. Han sido previsores y han habilitado parques temáticos para poder vacunar.
Ejemplo de desorganización lo tenemos en Balaguer a un mes y medio para disfrutar del sol primaveral, porque no olvidemos el dicho de “Balaguer Ciutat Tropical”… el equipo de gobierno llevará al próximo pleno la modificación para poder poner estufas y cerrar las terrazas para poder utilizarlas en invierno. Diría que esta modificación llega un poco tarde, pero ya sabemos que están más interesados en pancartas, lazos y cohetes que vayan al espacio con la nueva NASA catalana, y sobre todo en que sus fieles seguidores puedan asistir a sus mítines saltándose el confinamiento municipal, porque claro, son una “raza superior”.
Una raça superior, no…però un número superior…després de les eleccions d’ahir…sembla que sí 🙂